Nuestra hija entró al centro cuando apenas contaba con cinco meses de vida y desde el primer día hemos encontrado un entorno muy agradable y familiar, así como un equipo de grandes profesionales, jóvenes y dinámicos, que nos ha transmitido la tranquilidad de dejar nuestro más preciado tesoro en las mejores manos.
Debo recalcar:
– la importancia del amplio y flexible horario del que disponen,
– que ofrecen un magnífico servicio de cocina casera,
– un interesantísimo proyecto educativo, con métodos muy diversos, dinámicos y activos que estimulan al máximo a nuestra hija,
– y que hacen que los padres seamos partícipes de cualquiera de las rutinas del centro y nos mantienen informados al dedillo de cualquier novedad en la vida de nuestra pequeña para poder estar en completa sintonía en una educación conjunta.
No sabría qué aspecto del centro es el más destacable. Bueno sí, el hecho de que no sólo cuidan de nuestra hija, sino que además participan activamente en su formación para todos los aspectos de su día a día, ayudándonos a crear una rutina que nos facilita muchísimo la educación de la peque y, sobre todo, que la hacen muy feliz.